Prácticamente todo el mundo ha oído hablar del Concorde, el avión comercial construido por franceses e ingleses que era capaz de volar a velocidades supersónicas. No obstante, ya no tanta gente conoce el otro supersónico comercial, el Tu-144. Para todo aquel que no haya oído hablar todavía de este avión ruso, he aquí una pequeña presentación del mismo.

Cuenta la historia que en 1961 los rusos se enteraron del proyecto que se traían entre manos ingleses y franceses: la producción de un avión comercial capaz de volar a velocidades supersónicas. La Unión Soviética no quería quedarse atrás y encargó a Andrei Tupolev el diseño de una aeronave de las mismas características. El espionaje soviético se puso a funcionar y en los años siguientes consiguieron «robar» la información suficiente para copiar el diseño. En 1965 uno de los espías rusos fue capturadoen posesión de planos detallados del tren de aterrizaje, de los frenos y del fuselaje.
No obstante, y pese a las similitudes, no se considera que el Tu-144 fuera una copia del Concorde, aunque al avión ruso se le conocía vulgarmente como el Concordski. Entre sus diferencias, destaca la posición de los motores (más alejados del fuselaje en el Concorde), el diseño de las alas (ligeramente diferente) así como la presencia de canards en el diseño ruso.
Los rusos construyeron el Tu-144 a contrarreloj con la obsesión de tener el primer avión de pasajeros supersónico. Su primer vuelo de pruebas fue el 31 de diciembre de 1969, sólo unos meses después que el Concorde. En 1973 la batalla entre ambos aviones se llevó a los aires. En el festival aéreo de París de ese año, los dos diseños compitieron por ser el mejor. Primero voló el Concorde, e inmediatamente después lo hizo el Tu-144. El ruso despegó mucho más rápidamente y se mostró más maniobrable que su adversario. Sin embargo, pocos minutos después del despegue, en una extraña maniobra, el Tu-144 se estrelló, falleciendo sus seis ocupantes y varios civiles, lo que, aún así, no frenó el desarrollo de ambos aviones. En el siguiente vídeo se ve (no muy bien) el momento del accidente:
Al final, los rusos ganaron la supuesta batalla y lo pusieron en servicio en diciembre de 1975. El Concorde comenzó a operar en enero de 1976.
Sin embargo, el Tu-144 no estuvo mucho tiempo en activo. A raíz de muchos problemas, incluyendo otro accidente en 1978, se decidió suspender el servicio del avión el primero de junio de ese mismo año. El Concorde, en cambio, aguantó operativo hasta 2003. El elevado coste económico, junto a las cada vez más estrictas restricciones al vuelo supersónico y un fatal accidente, sentenciaron definitivamente al avión europeo.
Por último, en el siguiente vídeo podéis ver en acción al Concordski:
EL MIG-21 ANALOG…..CLARO, HABIA QUE PROVAR TODO EN OTROS AVIONES….EN LO REFERENTE A LOS ESPIAS, ESO ES MAS PARA EL AGENTE 86 QUE PARA ESTAS COSAS, IGUAL SIEMPRE LOS NORTEAMERICANOS QUISIERON SUBESTIMAR A LOS RUSOS….EN REALIDAD TIENEN UN GRAN COMPLEJO QUE NUNCA PUDIERON SUPERAR QUE ES EL DE NO TOLERAR QUE ALGUIEN SE LES ADELANTE EN CUALQUIER TERRENO..BUENO..ASI SON LOS YONIS…